martes, 29 de marzo de 2011

Estampas de la época...

Mercedes Franco y comunidad educativa


Mercedes Franco y alumnos


Vivienda de la familia Batalla en Plácido Maertínez y Sitja Nin

Mercedes Franco, ejemplo de educadora



Nacida el 2 de febrero de 1888, en la ciudad de Mercedes, realizó sus estudios en la escuela “Manuel Florecio Mantilla”, de donde egresó como Maestra Normal Nacional, para luego seguir estudiando en Bs As. Llegó a Paso de los Libres apenas iniciando el año 1911 y ya el 12 de julio de ese año fue nombrada por el Consejo Nacional de Educación Directora de la Escuela N° 77 que funcionó en la casa particular de Don Eugenio Batalla situada en la polvorienta intersección de San Luis (hoy Plácido Martínez) y Palmar (hoy Sitja Nin).



Fue la primera escuela Nacional del pueblo donde concurrían los niños del barrio Estación cuando el ferrocarril era sinónimo de progreso y modernidad del país. Esta ciudad de frontera era un punto estratégico con el trajinar de su puerto, el barrio poblado por humildes trabajadores algunos de ellos inmigrantes fueron ellos quienes ayudaron a la señorita Mercedes a abrir camino entre la maleza para llegar a la escuelita pequeña y precaria.



Durante los tres primeros años fue además de directora única maestra, más de un centenar de alumnos distribuidos en tres turnos.
Valiéndose de esa autoridad de educadora amiga del pueblo continuó con su misión y al poco tiempo de fundada la escuela 77 organizó la Sociedad Protectora de la Educación cuya comisión Directiva ha sido integrada por ella. Busco socios realizando festivales y veladas artísticas rompiéndose así la monotonía del lugar; proporcionó durante varios años ropas, calzados, libros, desayunos y almuerzos para los alumnos más humildes, estos últimos con la ayuda del Regimiento 11 de Caballería. También fundó la flamante Biblioteca Popular Sarmiento.



La señorita Mercedes Franco, no hizo de la educación su único apostolado; puede decirse que ella estaba en todo, activa partícipe de los acontecimientos del lugar, rompiendo así el esquema de subordinación al que estaban sujetas las mujeres; tuvo sus manos dispuestas para el cariño maternal de aquellos niños que más lo necesitaban.
Ella representaba a la nueva mujer correntina, la que rompía tabúes, esas mujeres que nunca retroceden, que siempre van al frente como punta de lanza.
Al cumplirse las Bodas de Oro de la escuela 77 una comisión Pro-homenaje solicitó a la Intendencia Municipal una calle que llevara el nombre de su maestra fundadora, donde se designa a la entonces calle Jujuy con el nombre de Mercedes Franco, como forma de perpetuar su memoria.